Reseñas del Jurado compuesto por elena Gómez García, barbara Schröder, Alvaros Santos llorante y Víctor Borrego, Granada 24 de noviembre
- EN LA CATEGORÍA DE CINEMÍSTICA:
PICOSACRO Alberto Lobelle (España 2024) 79 min. Doc.
Aunque parezca una paradoja, el cine es, sobre todo, un medio estático. Lo que le hace singular no es su capacidad para atrapar la imagen en movimiento sino el hecho de fijar el movimiento en la imagen. El cine nos da la oportunidad de contactar con la realidad física que en el fugaz devenir del presente no alcanzamos a percibir en toda su plenitud y, en ese sentido, el cine es re-velación, porque tiene el poder de saturar de su propia realidad a cada uno de los objetos que encuadra y estabiliza; de sacralizar el mundo físico y ponerlo de nuevo a nuestro alcance.
Una montaña, un pico, un punto hacia el que mirar y evadirse. Un mismo punto, origen de mitos, fabulaciones y acontecimientos históricos, en el que habrán coincidido incontables miradas a lo largo del tiempo, desde cada rincón de la vasta extensión del valle del Ulla. En los alrededores del Pico Sacro, el incesante trajinar de los hombres, con sus tractores, carreteras, canteras, contrasta con la alternancia imprevisible —entre el letargo y la violencia— de una naturaleza omnipotente; el estruendo de la dinamita compite con la invencible fiereza de tormentas y tempestades…
Cuando pensamos en nada o cuando inútilmente tratamos de recordar algo, nuestra mirada termina por fijarse en algún punto remoto del horizonte; en ocasiones, ese punto podría ser una montaña majestuosa con la que, poco a poco, nos iremos mimetizando. Distraerse mirando una montaña se puede convertir en un camino directo hacia el propio centro. Le ocurrió a Katsushika Hokusai con sus cuarenta y seis xilografías del monte Fuji y a Cezanne con sus obsesivas vistas del Monte de Sainte-Victorie. Alberto Lobelle vuelve a hacerlo con la mirada puesta en el Pico Sacro, componiendo una película en base a 50 planos fijos del monte y sus alrededores. El sonido es directo, sin diálogos ni voces en off, sin banda sonora añadida, excepto en los dos únicos momentos en los que la cámara sale de su inmovilidad y hace un barrido horizontal y ya, hacia el final de la película, se adentra en vertical desde el cielo hacia las oscuras entrañas de la tierra, mientras se escucha, en sostenido suspense, una música monocorde. Y después, tras la incierta oscuridad y el ruido, llega el silencio, el absoluto silencio del monte sumergido en un gris perla que todo lo iguala, en el que nuestra mirada deja de buscar y se aquieta… sentimos entonces que, del mismo modo que empezó todo, todo se acaba; reconocemos ese final sin fin que tantas veces hemos experimentado y olvidado; la extinción del que mira en el objeto de su mirar. Mantener la mirada fija en la montaña, desde el amanecer hasta su disolución en el crepúsculo, puede convertirse en una inigualable lección de vida.
LIZZY (Lizzy) Susanne Wallin (USA 2024) 15:30 min. Ensayo Doc. Sin diál.
Lizzy nos traslada a orillas del río Hillsborough en Tampa, Florida. Es una obra única y profundamente evocadora, una meditación cinematográfica sobre la muerte, el olvido y la impermanencia de todo lo humano. La película se convierte en un viaje sensorial y emocional en torno al legado físico y metafísico de quienes dejan este mundo.
El relato se despliega a través de un flujo visual y sonoro que va más allá de lo convencional y se erige como un símbolo del ciclo vital, una metáfora de lo efímero y lo inexorable del tiempo. El río Hillsborough aparece como un testigo heraclitiano, que fluye con indiferencia ante el devenir humano.
Lizzy es tanto una exploración personal como una declaración universal sobre cómo la naturaleza sigue su curso, ajena a los pequeños dramas humanos. Cabe destacar algunas imágenes tan puras y sencillas como evocadoras y sinceras, como, por ejemplo, los cocodrilos que descansan al sol o una mesa polvorienta con los restos de un último almuerzo junto a unos periódicos, que nos recuerdan que, al igual que estos, somos seres cotidianos, efímeros, de aquí y ahora. A través de imágenes hipnóticas y un diseño sonoro visceral, la obra invita a reflexionar sobre lo efímero de la vida y la transformación de la materia, recordándonos que el cambio es la única constante dentro del entramado de la existencia.
Mención especial: HUMANS DON’T COME WITH INSTRUCTIONS (Los humanos no venimos con instrucciones) Arnoidas Alubaskas (UK 2023) 18:34 min. Ensayo/Exper./Videoarte. VOSE.
Los humanos no vienen con instrucciones es un documental breve pero profundo que explora nuestra dependencia de las historias para dar sentido a la existencia. A través de un audaz montaje de material de archivo y un enfoque poético, reflexiona sobre los límites entre la ficción y la realidad, el deseo de narrar nuestras vidas y la inmortalización de momentos esenciales.
El filme aborda temas universales como la identidad, los recuerdos y la interconexión humana, destacando nuestra naturaleza incompleta y la importancia de aceptar la finitud para enriquecer la experiencia vital. Una hermosa obra que nos invita a cuestionar lo que creemos ser, abrazando la complejidad y la poesía de nuestra existencia.
Un homenaje al cine como medio para capturar la esencia humana, recordándonos que nuestras historias individuales están profundamente conectadas con las de los demás. Una invitación a un conocimiento integral que nos recuerda que nuestras historias personales no existen en aislamiento, sino que están intrínsecamente conectadas con las de los demás. - EN LA CATEGORÍA DE ANTROPOLOGÍA:
GATHERING FIREWOOD (Recogida de leña) Liivo Niglas (Estonia, 2024) 30 min. Doc. VOSI.
Su autor filma a los pastores nómadas de renos en la península de Yamal en Siberia occidental, Rusia, durante la temporada de partos y de crías en primavera. Esta película forma parte de una serie más amplia que explora la vida cotidiana de estos pastores nómadas. En esta pieza sigue a un grupo de mujeres Nenet recogiendo leña en una tundra cubierta de nieve.
En este acto de organización de renos y recogida de leña Liivo Niglas ha sabido hacer un documento muy bello de antropología directa, no invasiva, y no participativa. Respeta así desde su posición como testigo, el silencio de la tundra. Sobre ella se deslizan las escasas voces del pueblo nenet, el roce de sus ropajes de pieles al moverse, el chasquido de los trineos de madera, junto con algún tímido bramido y resople de los renos.
La tundra cual escenario de alfombra de nieve y protagonista, se muestra contundente y espléndida. Es un hermoso atrevimiento por parte del autor, mostrarnos con largos planos parte de la jornada de este pueblo sin ningún artificio ni ornamento
Liivo Niglas cuando nos presentó su film nos dijo que lo había rodado en 1999, cuando no existía aún vídeo de alta definición, y que la había restaurado con aplicaciones de algoritmos de inteligencia artificial, con un resultado final magnífico e importante para la representación visual de unos encuadres dominados por el blanco de la nieve.
SERPARI (Serpientes) Iría Sanjurjo (Italia, 2023). 20 min. Doc.
Es sabido que las aves son vistas, en el pensamiento simbólico y también en nuestros sueños, como mensajeras del cielo y origen del místico “lenguaje de los pájaros”: sustrato poético de toda expresión, idea que sobrevuela toda apariencia. Las serpientes, en cambio, como seres rastreros, apegados a la tierra, tienden a ser proscritas como símbolo enfrentado a los altos ideales que representan las aves. Por esto, causa tanto impacto asistir al culto a las serpientes que aún se sigue practicando en la Italia mágica de la provincia de l’Aquila, con motivo de las fiestas del abad Santo Domingo; personaje que toma el relevo y cristianiza, el culto a la ancestral Angizia; diosa asociada a las serpientes, que los antiguos marsos veneraban.
Iría Sanjurjo, dirige, fotografía y monta este documental que podría encajar en varias de las categorías del Festival, por ser al mismo tiempo “cinemístico”, “antropológico” y “ritualístico”; ya que, no solo ofrece el testimonio de un sorprendente acontecimiento social, sino que participa y, por momentos, asume el punto de vista rasante y contrapicado del alma de la fiesta: la serpiente.
La directora ha sabido acercarse a los acontecimientos con una mirada ágil y directa, capaz de transmitir la intensidad y la ternura con la que los vecinos de Cocullo confraternizan con las serpientes, en una muestra apasionante de respeto y confianza mutua. La cámara penetra en el corazón mismo del ritual sin hacerse notar, como un ente invisible; sus imágenes, de un puro y contrastado blanco y negro, evocan la mirada contundente y serena con la que la propia sierpe contempla lo que ocurre a su alrededor.
Conmueve acompañar al veterano “serpentero” en su reencuentro con el imponente reptil; “un animalito… con su vida… con sus cosas… que vive su vida como nosotros”: “Sei così bella!” —exclama— “sai chi sono” “tú me conoces” —le susurra entre caricias y besos—.
En el momento culminante de la película, la estatua del Santo, rodeada de fieles, es sacada en procesión y cubierta por un amasijo de serpientes que plácidamente se deslizan y abrazan, la cabeza, los hombros, los brazos y el báculo del abad. De regreso, antes de cruzar el umbral del templo, las serpientes, son retiradas de la estatua para que no penetren en el espacio sagrado. Aun siendo tan respetadas y queridas, no dejan de ser vistas como criaturas supervivientes del remoto y telúrico paganismo que permanece latente en el accidentado paisaje de los Abruzos.
Mención especial de Antropología: DAYIPARARA (La madre) Marta hincapié Uribe (Colombia 2013) 57min. Doc.
En 57 minutos de documental rodado en el Amazonas colombiano, Marta Incapié Uribe nos regala una narración absolutamente equilibrada, contemplativa y no desprovista de contenidos. A propósito de la aventura de la Madre Laura Montoya, espiritual y selvática, es sencillamente humana. Con la templanza de su voz en off Marta nos hace partícipes de su creencia en Dios a través de la naturaleza y la fe.
Hemos podido vislumbrar los rostros nocturnos de los indígenas Embera, de hombres y mujeres amazónicas, con una belleza que hacía mucho tiempo que no contemplábamos. - EN LA CATEGORÍA DE RITOS, MITOS Y COTIDIANEIDAD:
PAPY FAIT DU CINÉMA (Papi hace cine). Hélène Gaudu (Francia 2020) 59 min. Ficción. VOSI.
Esta película documenta y propicia el diálogo entre un abuelo nonagenario y su nieta, una cineasta novel que intenta realizar su primer largometraje valiéndose de la capacidad del cine para hacer realidad los sueños o, en este caso, las alucinaciones que experimentó el abuelo durante su convalecencia en el hospital tras una operación; visiones fantásticas habitadas por enfermeras angelicales e incursiones en los mundos selváticos de los hechiceros africanos. Como película de ficción, es una de las pocas que han concurrido a esta edición del festival, pero ¿dónde empieza y termina la ficción en esta obra inclasificable? ¿Opera prima de directora debutante, ensayo intergeneracional, diario fílmico, escenificación de mundos visionarios, retrato de familia, comedia de ficción… o todo al mismo tiempo?
El abuelo —Papy— que se presenta como un antiguo contable: “los números son mi vida”; persona pragmática que solo parece prestar atención a aquello que se puede medir y cuantificar: “elije bien tu profesión” —aconseja a su nieta— “sin dinero no puede hacerse nada en la vida”. El abuelo ha vivido, lo que se dice “con los pies en la tierra” al margen de las vanas aspiraciones propias de las mentes ilusas de los artistas. Sin embargo, al aceptar interpretar a sí mismo como actor protagonista de la película de Hélène, acabará transformándose en un hombre distinto, identificándose tanto con su personaje que, no solo se implica en su papel de actor, también va asumiendo y, poco a poco, imponiéndose como guionista y director —actividades que ejerce con una testarudez enternecedora—convencido de que solo él puede transmitir la imagen exacta de sus vivencias visionarias. De modo que Papy se va empoderando, decidido a tomar las riendas de la que ahora considera “su película”, una “hermosa película que ha de pasar a la historia del cine” (que, de momento, ya ha pasado a formar parte de la historia de Cinemística)
Bajo esta trama, en tono de amable comedia, van apareciendo toda una diversidad de temas: la posibilidad de una vejez activa, la insalvable distancia generacional, el cine como memoria viva y generador de utopías, el devenir de la cultura africana tras los procesos coloniales, los migrantes, las peripecias de una joven aspirante a directora para poder producir sus primeros proyectos, etc. Película entrañable, familiar, luminosa y optimista, que comienza presentando a su protagonista envuelto en la penumbra de una habitación, frente a una cortina cerrada que filtra la luz junto a todo lo que viene de fuera; y que termina con el abuelo rejuvenecido, descorriendo esa misma cortina para volver a asomarse al mundo.
Mención especial: I SUTRA JE ĐURĐEVDAN (Durdevan está listo para venir) Pedrag Todorovic (Serbia 2020) 40 min. Doc. VOSI. Ritos
Durdevan está listo para venir es una celebración visual y emocional de la tradición, la naturaleza y la resistencia de las raíces culturales. Ambientada en el pueblo de Oparic, en la región serbia de Levac, la película captura los preparativos del Día de San Jorge, una festividad ancestral que simboliza la llegada de la primavera y el renacimiento de los sentidos. A través de la cotidianidad, la película muestra cómo las manos de los lugareños entrelazan flores en coronas coloridas, uniendo pasado y presente en un ritual que trasciende generaciones, desde tiempos inmemoriales. La obra destaca por su pureza, austeridad, sinceridad y belleza. Es el retrato de un pueblo que encuentra en la tradición y la raigambre de sus ritos, un sentimiento de identidad y de continuidad. La película nos invita reflexionar sobre nuestras propias raíces y la belleza escondida en la simplicidad de los rituales que nos definen. - EN LA CATEGORÍA DE ESCUELAS:
ENTRE UNA MANO Y LA OTRA. Colectivo alRaso (España 2024) 6 min. Ensayo/Exper./Videoarte. Ritos
Un grupo de jóvenes coquetean con el celuloide en emulsión fotoquímica filmando con una cámara de súper 8. Con ella, crean unas imágenes en blanco y negro que confluyen de lo más abstracto al detalle, de lo borroso a lo transparente. Parece que están jugando. Utilizando la alternancia de los contrarios dotan a la pieza de un ritmo agraciado y encantador: una pantalla / dos pantallas, el silencio / el ruido, el movimiento / lo estático, el chico / la chica, el árbol / el río…
Como originalidad, y además para orgullo del colectivo, el video no ha tenido montaje, está editado tal cual lo rodaron, dejándolo así impregnado de la belleza de lo espontáneo, lo ingenuo y lleno de sinceridad.
Terminan con una maravillosa polifonía en la parte final que ellos, autoras y autores interpretan en las proyecciones en directo, dejando entre nosotros esa melodía de la infancia con la inocencia y la picaresca que le caracteriza. Es la reconquista de la inocencia visual. Felicidades alRaso, su profesorado y a una cantera joven que tiene mucho que expresar.
Mención especial: IN BETWEEN CITY (En medio de la ciudad) Ilya Kreines (Chequia 2024) 8:50 min. Animación. Sin diál. Escuelas
En medio de la ciudad es una arriesgada propuesta de animación que desafía los convencionalismos utilizando tampones o sellos como su medio principal de expresión. La película va desplegando un universo visual propio que, desde la sencillez, la abstracción, el dinamismo y el ritmo, se fusiona para representar el pulso de una ciudad industrializada en constante movimiento. La repetición y modificación de los sellos, gracias a las diferentes variaciones de la tinta, nos transmiten el ritmo, el ruido y el progreso vibrante de las ciudades modernas industrializadas. Cada tampón, meticulosamente creado, se convierte en parte de un entramado que refleja la constante interacción entre la maquinaria de la urbe, sus habitantes y su imparable evolución. El film no solo desafía las formas de animación, sino también las formas en las que percibimos la modernidad. - EN LA CATEGORÍA DE INFANTIL- ANIMACIÓN:
WÜSTENTIER (Bichos del desierto) Lina Walde (Alemania 2023) 7:40 min. Animación. Infantil
Delicioso cortometraje de animación infantil alemán, para niños entre 2 y 102 años, con voz en off en inglés, que en 7 minutos de duración resume el tópico esencial para la supervivencia de nuestra humana especia, y es que más allá de la sombra individual de la identidad, nos debemos a la sombra compartida y a la amistad. En la crisis de un caballo con sombra de pingüino y un pingüino con sombra de caballo que al final deciden ir juntos para compartirlas. Amenizado con una agradable banda sonora - MENCIÓN ESPECIAL A SU TRAYECTORIA CINEMATOGRÁFICA
STEHENDE WELLEN (Ondas estáticas) Sebastiano d’Ayala Valva (Francia 2024) 47 min. Doc. VOSI. Cinemística
El jurado de X Festival Cinemística ha decidido otorgar una “mención especial por su impecable trayectoria cinematográfica” a Sebastiano d’Ayala Valva. El director, que ya fue premiado en anteriores ocasiones por sus películas: “El primer movimiento de lo inmóvil” (2019) (en torno a la vida y obra de su Giacinto Scelsi, conde de Ayala Valva, compositor y poeta) y “Adiós al padre” (2021) (epístola fílmica al padre fallecido, que se debate entre el temor y el cariño); vuelve a emocionarnos con su última película; un viaje a los mundos sonoros de la mítica pionera de la música concreta: Eliene Radigue que, a sus 92 años, sigue profundizando en la naturaleza sutil del sonido colaborando desde 2015 con la compositora y clarinetista Carol Robinson, que también trabajó con Scelsi en los 80.
Carol Robinson será la parte visible de esta co-autoría, mientras Eliane Radigue apenas va a aparecer en pantalla… Lo esencial en esta película es evocado, sugerido, en un estar presente desde la ausencia. Ni siquiera llegaremos a escuchar la pieza musical que los músicos ensayan, ni la infinitud que sospechamos detrás de las imágenes aparentemente triviales que acompañan los ensayos; reflejos, hojas balanceándose, sombras en las cortinas… Nos asomamos sin llegar a vislumbrar el misterio que hay detrás de lo conocido, el flujo sonoro bajo la trama de la música, la visión que queda absorta en el mirar. Abrirse a lo complejo a través de la simple atención que se concentra en la eternidad del instante presente. Carol se enfrenta a los músicos sin un plan, sin partituras, con una idea musical que no se puede transcribir; inefable, que solo se alcanza a base de ensayos… hasta que, en el desapego que aporta la repetición, vayan surgiendo sonoridades genuinas, auténticamente originales; tratando de percibir ecos de otras sonoridades dentro del propio sonido.
¿Pero cómo filmar esa esencia sonora de la música? ¿Cómo trasladar a lo visual ese sentido de la escucha? ¿Cómo transmitir el estado de apertura necesario para percibir lo imperceptible? ¿Cómo llegar a ver reflejos de otras imágenes dentro de las imágenes? Sebastiano d’Ayala no ilustra, ni siquiera documenta, más bien parece que intentara armonizar esta forma radical de escucha con su propia forma radical de atender a lo que se nos aparece: el inmenso océano de lo sensible bajo la superficie del vibrante mantra en el que nos sumergimos.